La hice pensando en alguien que conocí que no se atrevía a declararse por si no le hacía gracia a las dos familias, ya que los dos eran los "patitos feos" de cada una. A ella no la conocí, pero él no era un patito feo en absoluto.
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Yo me sentía corriente,
incluso un poco mezquino,
midiendo, siempre midiendo
el doy y el recibo.
Tú eras poca cosa,
tal vez feuchilla amable,
alguien que pasa y no veo,
un existir más de la calle.
Hasta ese momento
en que dudaste, y yo dudé,
en que miraste y yo miré
y lo de siempre:
ahí estabas tú, ahí estaba yo;
por más que se repita
será igual de sorprendente
y maravilloso
que te quiero y que me quieres.
Ahora nos toca
convencer a tu familia
de que yo no soy mezquino
y a la mía
de que tú eres muy linda
y a la mía
de que tú eres muy lista.
A base de protegerme
de los daños presentidos,
yo era como un tigre de Bengala
con un colmillo muy retorcido.
(29 de Enero a 24 de Febrero de 2.002)
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